martes, 7 de abril de 2015

Animales

Pienso, no actúo: Maltrato animal

Hace unos años tuve una de esas fiebres WWF que no paró en nada. Mi sueño era ser miembro del Sea Shepherd, eventualmente no le conté ésto a nadie porque iban a pesar que era una 'hippie Wanna be' y no quería escuchar sus comentarios, yo solo soñaba que iba en un barco insultando a japoneses y tirándoles piedras. No soy vegetariana, de hecho amo el sabor de la carne y odio la doble moral que siento al comer chuleta de cerdo mientras veo programas de maltrato animal con lágrimas en los ojos, todo ésto termina en zapping para no torturarme sabiendo que no puedo hacer nada al respeto y que de cierta manera soy parte del sistema que mantiene vivo este tipo de torturas, un cerdo fue torturado para que te comas esa deliciosa chuleta y tienes que vivir con eso ¡Qué crueldad el remordimiento! Pero vivimos, continuamos, y criticamos SIEMPRE a esas personas que tienen el nivel de crueldad contra los animales un poco más subido de tono, esos que usan pieles y comen aletas de tiburón ¡No podemos evitar pensar que irán al infierno! Comer carne de vaca no es grave, de perro SÍ, ¡Desalmados! 

Me gusta leer los comentarios de Calamaro sobre la tauromaquia, y algunos de los comentarios e insultos que los detractores le dicen <Me divierten un poco esas peleas>. Éste es una claro ejemplo donde me veo flotando en medio del océano sin derecho a nadar hacia ninguna dirección, porque al comer carne nunca te será permitido opinar libremente sobre el maltrato animal. Por un lado el cantante apoya la tauromaquia de una manera absurda, y por el otro los detractores vegetarianos demuestran su misantropía, un toma y dame que nunca termina en nada porque al final cada quién piensa lo que le da la gana y seguro que la mayoría de esa gente lo que hace es pensar y no hacer algo al respecto sobre la causa que defiende. Volviendo al punto, me molesta que al ser carnívora no tenga derecho a opinar sobre el maltrato animal, y aún más molesto es saber que es cierto. Pienso y no actúo de nuevo, porque definitivamente es muy difícil cambiar una costumbre alimentaria, a personas como nosotros nos queda la humilde tarea de darle comida a perritos de la calle, no usar abrigos de piel o no ir más al circo, nunca eso sí, perdiendo la dignidad y compartir fotos en facebook de perritos de tres patas que con likes conseguirán una pata biónica.  

¿Ser vegetariana? No por ahora gracias, seguimos en el bando de los ni-ni, Lucero nos tildará de que no tenemos moral para criticarla, mientras que PETA nos querrá cambiar completamente hasta volvernos evangélicos o chicos de Herbalife, así de apasionados seríamos que no podríamos ni hablarles a nuestros monstruosos padres carnívoros. 

Para simples mortales, hay algo en lo que sí podemos ayudar:

Piensa y actúa

Pensando conscientemente las cosas, siempre llegaremos a algo.















Laura Bravo
*Imágenes extraídas de Pinterest





2 comentarios:

  1. Siempre he pensado en ser vegetariano, pero cuando no hay pollo, carne o pescado en mi plato, siento que algo falta. Creo que es un tema de cultura y crianza, igual nunca es tarde!.

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  2. Buenísimo el artículo! Plasmaste todo lo que "los doble moral" podemos llegar a pensar al respecto. Amo a los animales, amo la carne molida - Eso no tiene sentido, pero tú le diste uno.

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